Si pudiera dar con tus calmas
girando su entorno al compas del nuestro,
sintiendo el nadar de las almas
brotando en el cauce de un río siniestro,
Bebería el alcohol que has derramado
en cada supurar de un nuevo día.
Quisiera ser quien ha bramado
buscando perecer en tu osadía,
Colapsar tus ardientes pasiones,
sumiendo mi hacer a tu querer
bebiendote en aquellas ocasiones,
entre el tener y el poseer.
En cada grito silencioso
en cada sollozos sentidos
iluminarme pretencioso
y acrecentar los latidos
Refugiando el hedor taciturno
moliendo los hielos prendidos
aquellos caprichos nocturnos
con los fogones encendidos
Aspiraré esos últimos suspiros
en las trincheras de mi propio seno
que volteen e incineren los papiros,
las promesas de amor y su veneno...
Y al apagarse los últimos papeles
o el tabaco al impregnarse violento,
en aquel cobrizo que hoy repeles
te incendiarás a fuego lento...
girando su entorno al compas del nuestro,
sintiendo el nadar de las almas
brotando en el cauce de un río siniestro,
Bebería el alcohol que has derramado
en cada supurar de un nuevo día.
Quisiera ser quien ha bramado
buscando perecer en tu osadía,
Colapsar tus ardientes pasiones,
sumiendo mi hacer a tu querer
bebiendote en aquellas ocasiones,
entre el tener y el poseer.
En cada grito silencioso
en cada sollozos sentidos
iluminarme pretencioso
y acrecentar los latidos
Refugiando el hedor taciturno
moliendo los hielos prendidos
aquellos caprichos nocturnos
con los fogones encendidos
Aspiraré esos últimos suspiros
en las trincheras de mi propio seno
que volteen e incineren los papiros,
las promesas de amor y su veneno...
Y al apagarse los últimos papeles
o el tabaco al impregnarse violento,
en aquel cobrizo que hoy repeles
te incendiarás a fuego lento...