Quisiera besar tu desnudez,
hundir mis labios en tu vientre
llegar hasta vos en cada caricia
dormir en tus cicatrices.

Juntar todas tus derrotas
arrancarlas de tu agonía
y en cada gesto de dolor
ver nacer el nuevo extasis.

Ser refugio de tus miedos,
mi pecho, el techo en cada tormenta,
llenarte de muros y cobijas
con danzas de abrazos tiernos...

Sorprenderte en cada llanto,
y beber esas lágrimas amargas de otro ayer.
Regalarte dos sonrisas,
una para hoy y otra para mañana...