“Decidme mujer que nunca has soñado con beber el agua que alivie la sedienta pasión que por tus venas fluye cuando piensas en el tiempo pasado, en el tiempo perdido, en el tiempo olvidado, decidme sino añoras esa pizca de amor que desenfrenado abate tus entrañas y te sumerge en el infierno mas hermoso y rejuvenecedor. Decidme q no necesitas sentir que la sed acrecentada por las efímeras gotas de pasión momentánea, deben ser acalladas por una inagotable fuente de eso que todos llaman amor.......decidme que nunca mujer y me habréis callado para siempre!!!”

Este post tiene varios motivos, esto lo escribí hace bastante, incluso puede quelo haya posteado...no recuerdo. Pero luego de leer a Flequi con sus poemitas y a Maga hablando de histeria femenina me acordé de algo. Hubo un momento en el que la deseé con todas mis fuerzas, en el que sólo quice poseerla, no meramente en una cuestión carnal, era todo un trofeo sentimental. Era un deseo profundo y agudo, como cuando un capricho se enquista entre las ansias y el cariño, pero las dudas y la histeria podían más. Excusas, vueltas, vaivenes y demases, desaprovecho el instante en que mi vida se cruzaba con la de ella.
Finalmente no hubo final, no hubo concreción y quedaron volando estas palabras que impregnaban de realidad lo que podría haber quedado como un sueño lejano.